UN NUEVO BEBÉ

El siguiente ritual no es necesario hacerlo solamente cuando haya un recién nacido. Un hijastro que llega a una nueva familia o un hijo adoptivo también podrán ser bienvenidos formalmente a la familia.

Los familiares son duendes de Dios

NECESITARÁ:

• Una selección de abalorios.
• Una tirita de cuero o un hilo para enfilar cuentas.
• Un libro encuadernado o un bonito álbum y un lápiz.
• Amigos y familiares que pasarán a formar parte de la vida del niño.

Un altar resulta ideal para este ritual. Decore el altar con flores, símbolos de la buena suerte, o regalos, tarjetas de felicitación o con sus esperanzas para el futuro del niño, fotografías del niño, espíritus protectores y deidades, muñecos de peluche y cosas por el estilo. Tenga los abalorios preparados en un cuenco -uno para cada participante y dos para la buena suerte-. Tenga preparado el hilo o la tira de piel con un nudo firme en su extremo. Es aconsejable comunicar previamente a los participantes lo que se va a hacer para que tengan tiempo para pensarlo. De manera formal o informal, como usted desee, reúna a todos los participantes con el niño. Pronuncie un pequeño discurso presentando al niño al grupo, y dando a conocer la relación del niño con cada uno de los presentes. Por turnos, los participantes escogerán una cuenta que ofrecerán al niño con una bendición tradicional de "hada madrina": "Que tengas seguridad y confianza en ti mismo", por ejemplo, o "Que tengas un corazón cálido y cariñoso" o "Que tengas previsión y perspicacia". Resulta particularmente agradable escoger cualidades que nos hayan ayudado en nuestras propias vidas. Una vez pronunciados los deseos y se hayan entregado las cuentas, ensártelas en la tira. (Teniendo en cuenta asegurarse de que cada cuenta tiene un agujero lo suficientemente grande antes de la ceremonia). Escriba en el álbum el nombre de los participantes, el deseo de cada uno y el color de la cuenta que han escogido, o bien que cada uno lo escriba de su puño y letra al finalizar la ceremonia. Anude el otro extremo de la tira para que no se caigan las cuentas y átelo alrededor de la muñeca del niño y disfrute de la fiesta. Después, asegure ls cuentas con algún tipo de cierre adicional, para que el niño tenga un recuerdo permanente que pueda llevar cuando sea mayor.